Ficha escrita por:
Silvia, periodista y escritora sobre bricolaje y decoración
El termostato programable o cronotermostato, sirve no solo para elegir la temperatura deseada, sino también para programar en qué momento modificarla. La calefacción se enciende y se apaga automáticamente en función de las circunstancias y el rango horario definido. Solo utilizas la calefacción cuando es necesario, así que puedes llegar a ahorrar hasta un 25 % en calefacción, y algo menos en climatización.
El termostato programable (también conocido como programador de calefacción), es compatible con casi todos los aparatos de calefacción y climatización, como calderas, radiadores eléctricos, suelo radiante eléctrico, climatizadores, etc. Se puede elegir dependiendo de tu presupuesto y tus necesidades.
La elección de un cronotermostato implica la identificación y selección de los siguientes criterios:
Tipo de termostato: mecánico (+/- 2°C); electrónico (+/- 0,5°C) o digital (+/- 0,1°C);
compatibilidad con el sistema de calefacción: bomba de calor; radiadores eléctricos; caldera de gas o pellets; estufa de pellets;
tipo de termostato y control: programable (mando a distancia o en el propio aparato), o conexión remota (Smartphone, tablet, ordenador y compatibilidad con asistentes de voz);
modos de programación: modo confort; modo económico; modo anti-hielo o modo vacaciones;
instalación: por cable (empotrado o de superficie) o inalámbrica;
funciones: número de programas y programación diaria y/o semanal; detección de ventana abierta; indicador de consumo; bloqueo; ajuste de temperatura; detección de presencia; rango de regulación de temperatura de confort;
cantidad de actuadores y/o sensores y/o zonas controlables: los interruptores, que se dedican al control de los radiadores; los sensores de temperatura (instalación interior y exterior); las zonas con la cantidad de estancias de la vivienda que se pueden controlar.
Los controladores, o sistemas de control de la temperatura, aseguran un ahorro real y mejoran considerablemente el confort.
El IDAE recomienda las siguientes temperaturas para las estancias de una vivienda:
20°C a 21°C durante el día (16°C si están desocupadas) ;
15 a 17°C durante la noche y cuando la vivienda está desocupada;
17°C en el baño cuando no se usa, y 22°C cuando se usa.
En caso de ausencia de la vivienda, y por la noche, el IDAE recomienda bajar la temperatura a 15º - 17º. Por debajo de eso, debe estar entre 12°C y 14°C.
Cómo elegir un controlador de calefacción para mejorar la eficiencia energética
La función de los termostatos y cronotermostatos es encender o apagar el sistema de calefacción en función de una temperatura de confort. Así, podemos encontrar los siguientes tipos:
Los termostatos mecánicos permiten regular una temperatura fija, con una precisión de más o menos 2°.
Los termostatos electrónicos permiten regular la temperatura con una precisión de 0,5°. Esta es la mejor solución, ya que al ser más preciso, evita un consumo excesivo innecesario.
Los termostatos digitales son aún más precisos, pueden regular la temperatura con una precisión de 0,1º, aunque también solo permite programar una temperatura fija.
La programación nos da la posibilidad de planificar las temperaturas de todas las habitaciones de una casa. El termostato programador nos ofrece, como mínimo, tres modos de programación previamente configurados de fábrica.
El modo temperatura de confort. Este modo se corresponde con una temperatura recomendada que puede estar entre 19ºC y 21ºC, en horarios previamente programados según tu ritmo de vida habitual. Dependiendo del modelo, puede incorporar un modo confort avanzado que permite aumentar la temperatura de algunas habitaciones concretas, como, por ejemplo, el cuarto de baño, un poco antes de que vayas a utilizarlo;
el modo económico o eco. Este modo de programación permite bajar la temperatura durante la noche o si te ausentas de tu vivienda desde 2 hasta 48 horas;
el modo anti heladas o vacaciones, que deja la calefacción en espera. La calefacción solo se conecta si la temperatura baja de un determinado umbral, que normalmente suele ser 7ºC. Este tipo de programación se utiliza cuando te ausentas durante más de 2 días.
Además de estos modos previamente programados, también existen otros que pueden variar, según los modelos, para adaptarse a tus preferencias dependiendo de tu estilo de vida: hora de levantarse, horarios escalonados, ausencias prolongadas, etc.
Una programación inteligente y una buena gestión de la temperatura pueden reducir fácilmente la factura de la calefacción en un 25%.
Existen modelos según las opciones de programación. Pero también hay otros modelos con cable, o inalámbricos, que no necesitan apenas instalación. El precio de un termostato digital programable de control remoto (generalmente conectado a red WiFi) es más elevado, pero te servirá para controlar la instalación desde cualquier parte a través de un ordenador, un smartphone o una tablet. Comodidad y ahorro todo en uno.
Un cronotermostato con cable empotrado es apropiado cuando se cambia el sistema de calefacción o si quieres aprovechar una obra en la vivienda, puesto que así los cables pueden disimularse a la hora de hacer la instalación. Se fija en una pared, preferiblemente alejada de toda fuente de calor (horno, chimenea, etc.).
Los cronotermostatos inalámbricos funcionan mediante ondas de radio (radiofrecuencia). Consta de un emisor, desde el que se programa la temperatura y estará ubicado en la habitación a regular, y un receptor, instalado en la caldera, para activar o desactivar el circuito de calefacción. Por lo tanto, se pueden instalar más o menos alejados. Ten en cuenta que su alcance puede variar en función del modelo y distribución de la vivienda.
El cronotermostato se puede conectar para que puedas regular la instalación a través de tu smartphone, tu ordenador o tu tableta, y en mayor parte, pueden integrarse con asistentes de voz. Estés donde estés, ya sea de vacaciones o en el trabajo, puedes modificar los ajustes de tu calefacción o del aire acondicionado, si tienes pensado llegar antes o después de lo habitual, a tu conveniencia.
Algunos modelos pueden incluso geolocalizarte a través de tu Smartphone para ajustar la temperatura un poco antes de que llegues o justo después de que te vayas.
El termostato programable que elijas tiene que ser compatible con tu sistema de calefacción o climatización. Algunos modelos, por ejemplo, no están adaptados a los sistemas de bajo voltaje y viceversa.
Se entiende una tolerancia entre la temperatura de encendido y de apagado (histéresis). Con una diferencia de, por ejemplo, 1° C y una temperatura de consigna de 19° C, la calefacción se encenderá a 18,5° C y se apagará a 19,5° C. La diferencia de temperatura, puede ser fija o ajustable.
Con una histéresis muy baja, el contacto del termostato abre y cierra más veces, por lo que acorta la vida del aparato.
Programación diaria y/o semanal;
modo ventana abierta: para cortar la calefacción si se abren las ventanas;
visualización del consumo energético según la temperatura deseada;
función de bloqueo de botones (Hold): para evitar errores relacionados con la manipulación de la programación;
posibilidad de ajustar manual y temporalmente la temperatura de regulación sin modificar la programación;
detección de presencia que activa automáticamente la subida de temperatura, incluso si el termostato está programado para una franja horaria valle.
Si te lanzas a mejorar la eficiencia energética de tu vivienda quizá puedas beneficiarte de ayudas de la Administración. ¡Infórmate aquí!
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Ficha escrita por:
Silvia, periodista y escritora sobre bricolaje y decoración
Después de trabajar varios años en cadenas de televisión de primer orden, escogí dejar hablar a mi pluma y orientarme hacia la redacción y la edición.Soy tan apasionada de la decoración y del bricolaje, como de la historia y de la ciencia. Ecléctica tanto en mis gustos como en mis textos, escribo desde hace más de 25 años sobre esas temáticas. En mi activo se cuentan obras didácticas, novelas y noticias, así como numerosísimos artículos de bricolaje y decoración. En ellos cuento consejos y trucos experimentados en mi vieja casa, renovada poco a poco.