Ficha escrita por:
Silvia, periodista y escritora sobre bricolaje y decoración
141 fichas consejo
Si bien tanto el protector de colchón como el cubre colchón, o una funda más ligera, tienen como finalidad proteger el colchón, su utilidad no es la misma. Así, el protector de colchón es una protección impermeable que protege el colchón de la humedad o la condensación. Si pensamos que el cuerpo humano libera 0,5 l de sudor cada noche, sin olvidar los posibles biberones derramados o las eventuales pérdidas de orina, entenderemos mejor la importancia del protector de colchón.
Por su parte, el cubre colchón, o funda de colchón no tiene una función impermeable, pero permite mantener el colchón limpio, en cierto modo como una sábana bajera más gruesa.
Podemos incluso combinar los dos colocando primero el protector de colchón y luego el cubre colchón y cubrirlo todo con un juego de cama con sábana bajera. Por otro lado, el «topper» desempeña un papel totalmente diferente: aporta un grosor y un apoyo extras que hacen que el colchón sea más cómodo.
Para elegir el modelo de protector de colchón o la funda cubre colchón que mejor se adapte a ti, tendrás que evaluar tus necesidades en lo que respecta a las medidas, que evidentemente deben corresponder a las del colchón, pero también al material, más o menos cálido, absorbente o impermeable, natural o sintético, o incluso a los tratamientos, por ejemplo, para las personas alérgicas (antiácaros...). Finalmente, tendrás que tener en cuenta las posibles necesidades de mantenimiento.
El protector de colchón y el cubre colchón están disponibles en tres formas:
Cabe destacar que también existen protectores de colchón o cubre colchones específicamente diseñados para adaptarse a sofás-cama o camas articuladas.
Para que no se formen pliegues que te incomoden mientras duermes, las medidas del protector de colchón o el cubre colchón deben corresponderse perfectamente con las del colchón, ya sea para una o dos personas, tanto en anchura como en longitud.
Asimismo, fíjate en la altura de las zonas elásticas, que debe ser ligeramente superior a la del colchón.
En la confección de un protector de colchón o un cubre colchón se utilizan principalmente determinados materiales. Teniendo en cuenta que cuanto mayor es el gramaje, es decir, el peso por m2, más absorbente es el material, encontramos los siguientes:
El muletón es un material formado por un tejido de dos hilos de algodón. Hace que los protectores de colchón y cubre colchones sean mullidos y de tacto suave, pero también cálidos y, por lo tanto, perfectos para usar durante el invierno.
Este material suave y muy absorbente está compuesto por una mezcla de algodón y poliéster, el cual también favorece la circulación del aire. Por eso, es mejor para el verano.
El tejido de punto es un tejido tricotado que hace que el protector de colchón o el cubre colchón sea suave y elástico a la vez que ligero. Este tejido de punto puede ser de algodón 100 % o de polialgodón, un material que combina fibras sintéticas y algodón para aunar las ventajas de ambos.
El tejido de punto es un material muy utilizado en protectores de colchón o cubre colchones de tipo sábana bajera.
El protector de colchón incorpora un material impermeable:
Si bien algunos materiales son naturalmente antialergénicos, como el algodón 100 % ecológico, algunos protectores de colchón o cubre colchones pueden beneficiarse de un tratamiento químico antibacteriano o antiácaros.
También tendrás que tener en cuenta las posibles necesidades de mantenimiento cuando vayas a tomar una decisión.
Evidentemente, que el protector de colchón o el cubre colchón sea lavable a mayor o menor temperatura supone una ventaja en lo que respecta a la facilidad de mantenimiento.
También existen protectores de colchones desechables que se suelen usar, sobre todo, en el sector público.
Ficha escrita por:
Silvia, periodista y escritora sobre bricolaje y decoración, 141 fichas consejo
Después de trabajar varios años en cadenas de televisión de primer orden, escogí dejar hablar a mi pluma y orientarme hacia la redacción y la edición.Soy tan apasionada de la decoración y del bricolaje, como de la historia y de la ciencia. Ecléctica tanto en mis gustos como en mis textos, escribo desde hace más de 25 años sobre esas temáticas. En mi activo se cuentan obras didácticas, novelas y noticias, así como numerosísimos artículos de bricolaje y decoración. En ellos cuento consejos y trucos experimentados en mi vieja casa, renovada poco a poco.