Ficha escrita por:
Tess, Asesora de decoración y pintura
Una bombilla inteligente es un tipo de bombilla LED. Es más económica que sus homólogas fluorescentes compactas o de filamento. Se controla a distancia y se pueden programar, entre otras cosas, franjas horarias, modificar la intensidad luminosa o la temperatura del color. Para elegir un modelo adecuado, solo tienes que determinar el tipo de uso que le quieres dar, e informarte sobre las funciones disponibles y sobre sus características técnicas.
Las bombillas inteligentes se pueden utilizar como:
Iluminación principal;
iluminación auxiliar: luz ambiental, iluminación nocturna infantil;
elemento decorativo: bombilla o tira LED;
para escuchar música: gracias a un altavoz integrado.
Las bombillas inteligentes se distinguen por sus características técnicas:
Casquillos y formas: E14, E27, B22, Gu10, Gu5.3, esféricas, foco y forma de llama;
sistemas de conexión: Bluetooth, WiFi, control remoto;
bombillas inteligentes: geofencing y alertas.
Si bien se trata de bombillas de carácter particular, puedes utilizarla para iluminar las habitaciones principales. Usarla en el techo o sobre una lámpara de pie, sólo tienes que elegir modelos con una potencia máxima alta, para que cumplan bien con su función. Las bombillas inteligentes suelen tener una amplitud de iluminación, es decir, que al regularlas en el ajuste más bajo iluminan muy poco, y al ponerlas en el ajuste más alto, pueden utilizarse como iluminación principal.
Puedes seleccionar las temperaturas de color de 4000 K (kelvin) o más (blanco frío) para habitaciones como la cocina o el baño y por debajo de 4000 K (blanco cálido) para dormitorios, aseos o pasillos.
Entre sus numerosas funciones, la bombilla conectada sirve para generar una atmósfera personalizada, en particular, gracias a la regulación de la intensidad o de la temperatura de color de la luz. Así, se puede utilizar para iluminar:
Un espacio relajante con una luz tenue, más bien cálida;
un espacio de lectura, con una luz más bien blanca, pero de intensidad media, para que no se canse la vista;
un dormitorio infantil, con una luz de color variable y suave, que se puede encender o apagar a distancia.
También puedes instalar varios puntos de luz regulables en un salón. No hay nada mejor para crear un ambiente relajado en el que tomarse un aperitivo con los amigos.
Gracias a sus numerosas funciones, la bombilla conectada se puede utilizar como un auténtico elemento de decoración. De hecho, el tipo de luz emitida se puede combinar con los colores del interior para integrarla en la habitación.
Tonos verdes en una decoración natural y campestre, colores suaves para la habitación de un bebé, etc. ¡Dale rienda suelta a la imaginación!
Las tiras LED, son ideales para resaltar el mobiliario, puedes instalarla fácilmente alrededor de cuadros o muebles o debajo de la televisión. Resaltan los objetos de la casa. Al igual que las bombillas conectadas, se pueden controlar a distancia, y cambiar el color y la intensidad de la luz.
Hay conectores que permiten unirlas para tener tiras más largas.
Las bombillas inteligentes pueden llevar diferentes tipos de casquillos:
E27 o casquillo de rosca gruesa para lámparas de colgar, plafones y algunas lámparas de pie;
E14 o casquillo de rosca pequeña para lámparas y apliques;
B22 o casquillo de bayoneta para lámparas de colgar;
Gu10 y Gu5.3 (bombillas de patillas) para algunos apliques y focos.
Esta variedad de casquillos permite adaptar las bombillas inteligentes a prácticamente cualquier tipo de configuración posible en una casa.
Las bombillas LED inteligentes están disponibles en tres formas clásicas.
Bombillas esféricas: para casquillos E27, B22 y algunos modelos de E14.
Bombillas en forma de llama: principalmente para los E14.
Bombillas foco: Gu10 y Gu5.3.
Este es el modelo de conexión remota más habitual. Este sistema de conexión permite controlar a distancia las bombillas inteligentes, pero su alcance se limita al interior de la vivienda.
El dispositivo ya viene instalado en la mayoría de los smartphones y tabletas, y solo hay que reconocer el código de la bombilla. Una vez activada la conexión, podrás configurarla como tú quieras.
Más práctica, pero algo menos habitual, la conexión por WiFi permite acceder a los objetos conectados desde el exterior de la casa, simplemente teniendo una red WiFi. Al igual que con el Bluetooth, solo tienes que reconocer la bombilla desde el teléfono y conectarte.
Así pues, puedes desactivar el dispositivo a distancia o encender las bombillas para que parezca que hay gente en casa y ahuyentar a cualquier ladrón.
Este es el primer modelo de conexión a distancia que apareció en el mercado y todavía se puede encontrar. Con este tipo de bombilla no se utilizan el teléfono móvil ni la tablet, sino que funciona con un controlador remoto con el que puedes elegir el efecto que vas a darle a la bombilla inteligente. El uso de este sistema está limitado al hogar, de manera que la instalación de la conexión es la más sencilla de todos los tipos. Sin embargo, este tipo de bombilla se está dejando atrás, en beneficio de las bombillas con mayor alcance o tecnología más moderna.
Hay sistemas llamados "inteligentes" que controlan las bombillas inteligentes de forma autónoma, siguiendo una programación previamente establecida.
Este sistema permite apagar las bombillas que se han quedado encendidas con el teléfono a medida que éste se aleja de la casa. Perfecto para la gente que no tiene tiempo para estar pensando en todo.
Es una función muy práctica, que permite que el teléfono apague las bombillas y otros objetos conectados a las horas previamente programadas. Es una función perfecta para la decoración navideña, por ejemplo, ya que puedes regular la amplitud de tu iluminación.
Hay bombillas LED inteligentes que también pueden emitir alertas. Una vez programada a través de una aplicación de un smartphone, la bombilla parpadea, cambia de color o emite un sonido o una melodía para avisarnos de un evento y que no nos olvidemos.
Como sabes, las etiquetas energéticas de aparatos eléctricos y electrónicos indican la eficiencia de éstos, lo que representa una valiosa ayuda a la hora de elegir cualquiera de ellos para nuestros hogares. Elegir aquellos más eficientes contribuyen a reducir el consumo energético y, por tanto, los costes ligados a ese consumo.
Las bombillas son unos de los aparatos eléctricos etiquetados desde la aparición de este distintivo creado por la Unión Europea. Desde el 1 de septiembre de 2021 es de aplicación una nueva etiqueta energética, cuyas categorías han pasado a comprender de A+++ hasta G por una clasificación más simple comprendida entre la A y la G.
Además de la clase energética, en la etiqueta se indica el consumo energético por 1000h, expresado en kWh.
Ficha escrita por:
Tess, Asesora de decoración y pintura
Soy Tess, de 27 años, y llevo 7 en el mundo del bricolaje, en concreto en el de la pintura y decoración. ¡He encontrado cómo unir lo util y lo agradable a través de mi pasión por la escritura! Lanzarme a la redacción y poder aconsejar sobre decoración a los principiantes (o incluso a personas más experimentadas) es un verdadero placer para mi. Me encanta compartir mi saber hacer y mi experiencia y darte los mejores consejos para tus momentos de bricolaje.