Ficha escrita por:
Silvia, periodista y escritora sobre bricolaje y decoración
130 fichas consejo
Al igual que un refrigerador, la climatización funciona tomando el aire caliente del exterior y con un fluido refrigerante, lo enfría para posteriormente introducirlo en el interior de tu vivienda. Si optas por un climatizador frío calor, el dispositivo podrá, en modo calefacción, tomar esta vez el aire frío del exterior y una vez calentado, introducirlo al interior de tu vivienda.
Podrás elegir entre un climatizador monobloque, más barato pero menos potente y más ruidoso, y un climatizador con split, más potente y capaz de enfriar varias habitaciones, pero también más caro.
Debes tener en cuenta varios criterios, de la capacidad de refrigeración que se debe adaptar a tus requisitos o necesidades y la eficiencia energética, para que tu climatización sea lo más eficiente posible. Sin olvidar el nivel sonoro o los diferentes tratamientos del aire.
Será necesario también tener en cuenta las dificultades de instalación de las unidades internas y también las exteriores, así como las tareas necesarias de mantenimiento.
Existen dos grandes tipos de climatizadores: el climatizador monobloque y el climatizador split o aire acondicionado.
El climatizador monobloque está, como su nombre indica, compuesto por un solo elemento que contiene la totalidad del circuito de refrigeración. Se coloca en la habitación en la que se deseas captar el calor, que se expulsa luego hacia el exterior a través de un tubo flexible. Este tubo pasa por una boca de evacuación o en su defecto, por la pequeña apertura o rendija de una puerta o de una ventana.
El climatizador monobloque está indicado para habitaciones pequeñas (menos de 30 m2), es barato y fácil de instalar. Pero también es relativamente ruidoso y no puede enfriar grandes volúmenes.
El climatizador split está compuesto por dos unidades: una unidad interior que presenta la mayoría de las veces una forma de bloque o equipo de pared y una unidad externa, ambas se conectan con tubos de diámetro pequeño.
Multi-split, el climatizador dispone de varias unidades interiores para refrigerar un volumen de aire muy grande o varias habitaciones.
Más discreto y menos ruidoso que un modelo monobloque, un aire acondicionado split tiene también una potencia mayor, aunque es más caro.
El climatizador con bomba de calor funciona de la misma manera que un climatizador clásico, pero puede revertir su ciclo de refrigeración para producir en este caso aire caliente.
De la misma manera que una bomba de calor, extrae las calorías presentes en el aire exterior para enviarlas al interior de la habitación o habitaciones. Debido a su mayor complejidad, debe ser instalado por un profesional.
El aire acondicionado fijo permanece en su lugar en la misma habitación, lo cual evita toda manipulación. Si se trata de un climatizador split canalizado por tubos o conductos, éstos pueden ocultarse detrás de una pared o de un falso techo para obtener una discreción total.
Climatizador monobloque y climatizador split pueden ambos ser móviles. En el primer caso, solamente la unidad interior, montada sobre ruedas, se puede desplazar.
En el segundo, las dos unidades, conectadas por un tubo flexible y desconectable, son móviles. Una climatización split es sin embargo difícil de desplazar.
Los criterios de elección son importantes y numerosos: capacidad de refrigeración, coeficiente de eficiencia, nivel sonoro o de deshumidificación.
La capacidad de refrigeración de un climatizador se calcula en BTU (British Thermal Unit) y se expresa en vatios, sabiendo que 1 W = 3,414 BTU. La capacidad de refrigeración depende de la capacidad de un aire acondicionado para enfriar un volumen dado.
Si esta capacidad es insuficiente, la climatización funcionará durante más tiempo con una menor eficiencia. Inversamente, si es demasiado grande, el climatizador consumirá innecesariamente más energía.
Para calcular la capacidad o potencia necesaria, es necesario hacer un balance térmico que tomará en consideración todos los datos, entre los cuales: el volumen de la habitación, los materiales de las aperturas, la incidencia del sol, el aislamiento térmico, el número de ocupantes, etc.
Si deseas determinar tú mismo qué capacidad de refrigeración necesitas, debes tener en cuenta que se requiere una capacidad de al menos 100 W por m2 o 50 W por m3. Para una habitación de 20 m2 con una altura de techo de 2,5 m, la potencia mínima aconsejada será de 2500 watts (20 x 2,5 x 50).
Existen varios indicadores de eficiencia a tener en cuenta:
El ruido emitido por el aire acondicionado, expresado en dB (decibelios) es otro criterio que se debe tener en cuenta, sabiendo que:
Para asegurarte noches tranquilas, elige uno que tenga la opción silencio, también llamada sleep. Esta opción reduce progresivamente la potencia del aparato y al mismo tiempo reduce el ruido, que baja a menos de 20 dB, lo que equivale a una conversación en voz baja.
La climatización no solo enfría el aire:
El control remoto es una opción muy práctica para controlar el climatizador a distancia sin tener que desplazarse.
Para instalar un aire acondicionado correctamente, la o las unidades interiores y eventualmente la unidad exterior deben estar bien ubicadas para ofrecerte un confort óptimo.
El aire acondicionado no debe soplar aire frío directamente sobre tí. La o las unidades split murales deben colocarse lo más alto posible, teniendo la precaución de no obstruir la circulación de aire. Pero deben permanecer suficientemente accesibles para facilitar su mantenimiento.
La unidad exterior se coloca al aire libre (y no en una cabina o un cobertizo de jardín), aunque sí se debe proteger del sol y de los vientos dominantes.
Debido al ruido que emite, evita instalarlo muy cerca de los dormitorios u orientado o cerca de tus vecinos.
Un mantenimiento frecuente, tanto de la o las unidades interiores como de la unidad exterior, es indispensable para el buen funcionamiento de la climatización. Los filtros de aire deben limpiarse regularmente, al ventilador hay que eliminar el polvo y vaciar el recipiente recuperador de agua.
Ficha escrita por:
Silvia, periodista y escritora sobre bricolaje y decoración, 130 fichas consejo
Después de trabajar varios años en cadenas de televisión de primer orden, escogí dejar hablar a mi pluma y orientarme hacia la redacción y la edición.Soy tan apasionada de la decoración y del bricolaje, como de la historia y de la ciencia. Ecléctica tanto en mis gustos como en mis textos, escribo desde hace más de 25 años sobre esas temáticas. En mi activo se cuentan obras didácticas, novelas y noticias, así como numerosísimos artículos de bricolaje y decoración. En ellos cuento consejos y trucos experimentados en mi vieja casa, renovada poco a poco.