Ficha escrita por:
Lucas, apasionado constructor con madera, Pamplona
Una caseta de jardín se puede construir con materiales diferentes: madera, metal y PVC o resina. Cada material tiene sus ventajas y desventajas y si se mantienen bien, la estructura de la caseta de jardín es resistente.
Cualquiera que sea el material, una caseta de jardín se compone de:
un techo cubierto con tela asfáltica, bituminosa o acero que puede perder a lo largo de los años su estanqueidad;
cuatro paredes de paneles o tablones unidos a postes que pueden oxidarse, pudrirse o simplemente romperse;
una puerta y, a menudo, ventanas con apertura abatible mediante bisagras, que suelen llevar sistemas de bloqueo como el tirador o la cerradura. Los agentes atmosféricos afectan su calidad y funcionalidad.
Presente principalmente en casetas de madera, este material es económico y muy efectivo, pero es frágil y puede deteriorarse rápidamente. La tela asfáltica descansa sobre el techo en forma de rollos o planchas, del mismo tipo que un techo de pizarra.
Si notas una filtración de agua o compruebas que una de las secciones de la tela asfáltica está dañada deberás reemplazarla : quita los clavos o grapas que lo sujetan con un extractor de clavos, sin quitar el resto de la cobertura. Luego coloca un cuadrado o banda del mismo tamaño y clávalo para obtener un sellado perfecto. Si la caseta del jardín está cubierta con placas bituminosas que imitan las tejas, las placas defectuosas se reemplazan siguiendo el mismo método.
Las placas bituminosas y la tela asfáltica también se pueden pegar calentándolos con un soplete. También se pueden pegar fácilmente con silicona y una pistola, aunque eso es el típico recurso fácil.
Las filtraciones en los cobertizos de jardín cubiertos con tela asfáltica o placas bituminosas se localizan con mayor frecuencia en las juntas, o en la cumbrera. Un cordón de silicona del mismo color que el tejado y aplicado con una pistola a menudo resuelven el problema.
Reconocido por su larga vida útil, puede ser que tengas que cambiar parte del techo o reforzarlo, y ¡no hay nada más sencillo! Con una llave o un destornillador, desatornilla los tornillos que sujetan la plancha, así como los que sujetan las planchas adyacentes, para que sea más fácil quitar la que se va a cambiar.
Compra una placa del mismo modelo y tamaño, o ajusta el tamaño con una amoladora o una cortadora de metal e insértala en su lugar. Atornilla la placa de metal en la estructura de la caseta de jardín taladrando previamente los materiales. No olvides las pequeñas arandelas de plástico en los tornillos, ¡garantizan la estanqueidad!
El problema principal es que las tablas a menudo se montan en un sistema machihembrado, de lengüeta y ranura, por lo que debes eliminar teóricamente toda la parte superior, ¡y también una parte del techo! Una solución más rápida es quitar cuidadosamente la lama y clavar una nueva en su lugar. El sistema machihembrado, utilizado en particular para el sellado, puede ser reemplazado por una junta de silicona.
Si la lama está parcialmente dañada, también puedes insertar pasta de madera y luego lijarla antes de tratarla con un producto adecuado.
Si una parte de la pared está oxidada, simplemente frótala con un cepillo de alambre, lija la parte corroída y luego píntala con pintura exterior resistente al óxido del mismo color que la caseta. Generalmente los proveedores indican el color RAL de la caseta comprada (el tono de color). ¡Piensa siempre en cuidar tu caseta de jardín para evitar repararla!
Los paneles de metal generalmente se superponen verticalmente. Por lo tanto, es muy fácil cambiarlos con un mínimo de herramientas. Desatornilla los tornillos o pernos del panel y vuelve a colocar un nuevo panel - los fabricantes los venden en servicio postventa - teniendo cuidado de respetar la superposición con el panel adyacente.
Si la puerta de tu caseta de jardín chirría o se cierra mal, ¡bastará con una pequeña cantidad de lubricante en la cerradura o las bisagras!
Sin embargo, las bisagras pueden coger holgura y será necesario reemplazarlas. Dos soluciones: primero intenta fijarlas con tornillos de mayor diámetro o bien, reemplázalas por unas nuevas bisagras de las mismas dimensiones, elige bisagras inoxidables. Si la madera está dañada, también puedes desplazar las bisagras.
Si vas a cambiar la puerta, toma tus medidas con precisión, desatornilla las bisagras y vuelve a instalar la nueva - comprueba la compatibilidad antes de comprar.
Para cambiar un cristal roto, primero observa su sistema de montaje, que a menudo está compuesto por junquillos que sujetan el cristal, normalmente a presión o clavados.
Algunos vidrios tradicionales se fijan con masilla o pasta de madera y en este caso deberás quitarlos con un cortador (cutter) o un cuchillo pequeño.
¡Reemplaza el cristal usando guantes de protección! Luego inserta los junquillos o fija el cristal en varios puntos antes de aplicar la masilla con una espátula. En el caso del acristalamiento de plexiglás, el riesgo de cortes es menor y el proceso de reemplazo es idéntico.
Ficha escrita por:
Lucas, apasionado constructor con madera, Pamplona
Después de haber trabajado algún tiempo en la construcción, en concreto en el sector de las reformas, pintura, embaldosado, carpintería, montaje de cocinas y de cuartos de baño, decidí obtener el diploma de montador-constructor de madera y creo que ha sido una buena decisión, porque no hay nada más agradable que trabajar una estructura o concebir una casa de madera. Me apasiona todo lo relacionado con el trabajo de la madera y uno de mis sueños es construir mi propia casa con este material. Además de eso, soy un auténtico incondicional de las herramientas utilizadas en la construcción: me encanta informarme acerca de las novedades, los métodos de utilización, los trucos y las prestaciones de cada herramienta nueva que sale al mercado, tanto las utilizadas para el trabajo de la madera, como todas las demás. Estaré encantado de daros consejos y de ayudaros a elegir. ¡Feliz bricolaje!