Ficha escrita por:
Ana, Pintora
La función del panel antisalpicaduras o backsplash es proteger la pared de las salpicaduras de agua y de grasa para facilitar el mantenimiento y limpieza de tu cocina. Salvo cuando sea de acero inoxidable o de cristal de seguridad, el salpicadero no está adaptado a un uso detrás de una placa de cocina. Deberás colocar un fondo de campana estanco y resistente al calor.
Su mantenimiento es sencillo y rápido: un trapo humedecido en agua jabonosa, seguido de una limpieza rápida con un paño multifibras para evitar huellas.
Tanto si se integra en la decoración, como si eliges destacarlo, el salpicadero dará el toque final a la ambientación de tu cocina.
Ya quedan lejanos los tiempos en que se utilizaba sistemáticamente el mismo material tanto para el salpicadero como para la encimera. Actualmente, el salpicadero tiene su propio diseño y aporta carácter a tu cocina. No obstante, encontramos similitudes en los materiales disponibles.
El salpicadero laminado es la opción más popular. Los hay de todos los tipos, colores y efectos. El laminado es de limpieza fácil y muy resistente. Se corta de manera sencilla y se puede pegar en un solo bloque (sin junta) directamente sobre los azulejos. Es ideal para los amantes de la madera (un material que se desaconseja para los salpicaderos), ya que existen infinidad de laminados imitando madera, aporta un toque de encanto y estilo a su cocina sin los inconvenientes de la madera.
Muy fácil de colocar, el salpicadero adhesivo está impermeabilizado (para facilitar su mantenimiento) y te permite cambiar de estilo al instante sin retirar el antiguo revestimiento. Esta opción presenta muchas versiones y motivos (imitación de baldosas de cemento, mosaicos, ladrillo...) que aportarán un toque elegante personalizado a tu cocina.
El acero inoxidable es un material muy higiénico y armoniza perfectamente con los electrodomésticos del mismo acabado. Ultra resistente, el acero inoxidable no teme al agua. Se recomienda un acero inoxidable antihuellas para facilitar su limpieza. Se coloca aproximadamente a 10 centímetros de las placas o fuegos.
A la vez económico y con un mantenimiento sencillo, el azulejo es uno de los materiales más frecuentemente utilizados. Los fabricantes han desarrollado una gama muy amplia, tanto en formas como en colores (con relieve, con motivos, con estampados o brillantes...). También existen placas de azulejo (en formato muy grande) que proporcionan a tu cocina un aspecto contemporáneo (efecto hormigón visto, industrial).
Original y de diseño, el salpicadero de cristal de seguridad ofrece numerosas posibilidades en cuanto a colores y acabados. Es la estrella de las cocinas de moda. Su resistencia al calor y su fácil mantenimiento no hacen sino aumentar su atractivo. Un salpicadero de cristal de seguridad aporta brillo y luminosidad a tu cocina. Para conseguir un aspecto exclusivo, opta por un cristal personalizable con un fondo de tu elección (imitación de arena, hierba, mar...). Aquí deberás controlar tu presupuesto, ya que la factura puede subir de manera rápida.
La resina es muy resistente a los impactos y al calor (hasta 180°C), presenta un mantenimiento sencillo y es higiénica. Se presenta en dos versiones: brillante y mate. Sus inconvenientes: tiene tendencia a rayarse (para su limpieza diaria, utiliza un paño o una esponja suave) y no puede colocarse detrás de una placa de cocina.
Con aspecto de ladrillo o de piedra natural, aporta carácter a tu cocina. Para facilitar el mantenimiento, utiliza un spray antimanchas hidrófugo.
Posee el mismo brillo y aspecto que el cristal, pero se corta con mayor facilidad (basta con una simple sierra circular). Es sencillo de mantener y puede ser producido con dimensiones grandes, lo que supone una ventaja, si bien tampoco puede colocarse detrás de los fuegos de la cocina.
Ideal para restaurar una pared dañada, el revestimiento oculta todas las imperfecciones y aporta relieve y un toque decorativo a tu cocina. Es resistente en el tiempo y económico, aunque no puede ser empleado detrás de una placa de cocina.
Material | Facilidad de mantenimiento | Resistencia a las rayaduras | Aspecto económico | Utilización detrás de los fuegos |
Laminado | *** | ** | ** | No |
Salpicadero adhesivo | *** | *** | *** | No |
Acero inoxidable | ** | * | ** | Sí |
Azulejos | ** | *** | *** | Sí |
Cristal de seguridad | ** | * | * | Sí |
Resina | *** | * | ** | No |
Placa de adorno | ** | * | ** | No |
Revestimiento | ** | * | *** | No |
Zeolita | *** | ** | * | No |
* Bajo** Medio*** Fuerte
Frecuentemente de aluminio o de acero inoxidable. Las barras para salpicadero se ofrecen en diversos formatos para facilitar el acceso a los utensilios: barras para colgar utensilios de cocina (cazo, cucharón, espátula, batidora...), para desenrollar el papel de cocina, para colocar las especias, etc.
Estas barras son para adherir o para fijar y permiten tener siempre a mano los cuchillos y otros utensilios. También evitan que los más pequeños tengan acceso a esos elementos.
Para las cocinas elegantes que no tienen elementos altos, el salpicadero puede ser más ancho y disponer de estantes apropiados para colocar plantas aromáticas, velas, tarros, especias, etc.
Para tener un salpicadero original, puedes optar por un revestimiento magnético (para fijar las recetas), tipo pizarra borrable o incluso una pizarra negra.
Ya conoces todos los secretos para elegir de la mejor manera posible tu futuro salpicadero. Ahora solamente te queda comparar y dejar que actúe tu gusto.
Ficha escrita por:
Ana, Pintora
Autodidacta y apasionada del bricolaje y la decoración, me encantan las antigüedades, restaurar muebles, y crear otros diferentes y originales. Después de restaurar por completo la casa de mi hermana,¡me gustaría compartir mi experiencia con todos vosotros!