Ficha escrita por:
Paula, Amante del bricolaje
Un escritorio infantil es un mueble que tiene varias vidas en una habitación infantil. Este pequeño mueble siempre es un éxito, puesto que permite que el niño desarrolle su autonomía y disponga de un nuevo espacio. Existen escritorios de diferentes materiales: cristal, acero, madera, plástico...
En el caso de los más pequeños, debe ser un mueble del que despreocuparse —el niño lo rayará con rotuladores o le pondrá pegatinas, y el escritorio también recibirá golpes o incluso salpicaduras de pintura—.
Preguntas que debes hacerte antes de comprar un escritorio infantil:
¿Encaja el escritorio con la decoración elegida?
¿El tamaño es apropiado para la edad de mi hijo y el espacio del que dispongo?
¿Tiene suficiente espacio de almacenamiento?
¿Será duradero?
Antes de comprar un escritorio, ten en cuenta que debe adaptarse a la estatura del niño. El tablero debe llegar a la altura de los codos para garantizar que los más mayores tengan una buena postura en sus actividades de ocio o de trabajo.
En general, el primer escritorio está destinado a niños de 3-6 años. Después viene el escritorio escolar, que se suele conservar hasta la secundaria.
Muchos escritorios infantiles tienen medidas estándares:
75 cm de altura;
60 cm de anchura;
50 cm de profundidad.
Algunos escritorios tienen patas con altura regulable. Son una buena opción para adaptarse al niño a lo largo de los años antes de cambiar a un modelo de escritorio más grande.
En vez de un simple tablero con patas, elige modelos con casilleros o cajoneras. Estos permiten que la zona de trabajo o de creación esté despejada (al menos al principio de la actividad). Los escritorios infantiles proporcionan diferentes soluciones de almacenamiento:
Columna con cajones en un lado;
dos columnas con cajones a ambos lados de la silla;
compartimentos en el escritorio (cajones o estantes).
Si quieres un escritorio más original, también puedes crear un espacio de juego o de trabajo compuesto por los siguientes elementos:
Un escritorio apoyado sobre un trípode o en una estructura tubular;
columnas de almacenamiento independientes;
casilleros colgantes de MDF o HDF (de mejor calidad);
cajas o casilleros de cartón o de plástico para almacenar;
compartimentos de rejilla de metal fijados directamente en la pared.
Cada habitación infantil tiene su propia decoración. A algunos padres les gusta crear un espacio armonioso con un conjunto de muebles de la misma colección (cama, mesita de noche, escritorio, armario, cómoda). Otros prefieren una decoración desparejada.
Así pues, puedes crear diferentes tipos de decoración en una habitación infantil:
Temática (circo, princesa, caballero, coche, animales, etc.);
de un color (suave o llamativo);
con motivos grabados o impresos;
con una forma particular (escritorio escolar del siglo XIX, moderno, auténtico, tipo tocador, etc.);
hecho de un único material o un material predominante (madera en bruto, madera pintada, melamina, metal, PVC).
Para los más pequeños es muy aconsejable un escritorio de PVC. Es resistente a los golpes, en caso de caída no hace daño y se limpia con gran facilidad. Por lo demás, opta preferiblemente por un mueble pequeño con bordes redondeados.
Aunque al decorar la habitación por primera vez aún no haya que pedirle opinión al niño, ten en cuenta que no tardará en decirte lo que le gusta y lo que no. Tu hijo dará su opinión en función de:
Sus gustos;
sus necesidades;
lo que le apetezca en ese momento.
Si el niño participa en la elección del escritorio, ya sea para jugar o para trabajar, lo usará.
¡No hay edad para tener un pequeño escritorio! A los niños les encanta imitar a los mayores e inventarse historias, pero también tener un espacio de creación solo para ellos. Cuando empiezan a querer coger un papel y un lápiz ya pueden tener su pequeño escritorio. Muy pronto, a partir de un año de edad, un bebé puede empezar a hacer garabatos. Alrededor de los dos años de edad, el dibujo constituye una actividad regular.
Por lo tanto, para los más pequeños el escritorio tiene una función puramente recreativa. Una vez que empieza la primaria, el escritorio adquiere una segunda función, que puede ser la de hacer los deberes, pero a la edad de 6 años todavía es muy pronto.
Cuando el niño ya se ha acostumbrado al ritmo del colegio, el escritorio puede ayudarle a ponerse a trabajar. Si aún no lo usa para ello, no pasa nada, el escritorio puede durar al menos varios años.
Es esencial colocar el escritorio infantil en el lugar adecuado. Para evitar que al niño le dé una luz demasiado fuerte en la cara, es preferible colocar el escritorio infantil perpendicular a una ventana. El niño preferirá estar frente a la puerta o al menos poder verla. También conviene no colocarlo demasiado cerca de los estantes o la caja de los juguetes para evitar tentaciones.
Tener una lámpara de sobremesa en el escritorio ayuda a ver bien y a concentrarse. El niño estará más a gusto si el escritorio no está directamente debajo de una lámpara de techo. Ya sea para un niño pequeño o para un niño que empieza la primaria, el escritorio infantil es un mueble esencial para una habitación completa. Colorido o sobrio, con o sin espacio de almacenamiento, de madera o de pvc... Los hay para todos los gustos.
Ficha escrita por:
Paula, Amante del bricolaje
Crecí viendo a mi padre haciendo bricolaje todo el día. Gracias a él he aprendrido los conceptos básicos para poder personalizar y reinventar los muebles. Para mí el reciclaje es un modo de vida, así que me encanta dar una segunda a vida a todo lo que sea posible. Mis actividades preferidas son transformar muebles y decorar mi casa. ¡Espero que mis consejos sean de ayuda!