Ficha escrita por:
Patricio, Ingeniero electrónico
El sistema de filtración de la piscina tiene como objetivo purificar el agua de la misma con el fin de conseguir un agua clara, sana y libre de impurezas.
El agua se aspira por los skimmers, pasa por la depuradora, que contiene filtros y a continuación se expulsa en la piscina por las boquillas de impulsión.
En función de tu instalación, durante este trayecto el agua puede atravesar la electrólisis, el esterilizador de sal o el filtrado con arena. Equipado con unos prefiltros que se encargan de retener las impurezas más grandes, el filtro más importante permite retener las partículas más pequeñas. Los más sofisticados alcanzan una finura de filtración de 5 micras. Cuanto más fino sea el filtro, mejor garantizará un agua cristalina en tu piscina.
Además del sistema de filtrado, el otro componente crítico es la bomba de piscina, que permite la circulación del agua por los tubos. Estos dos elementos forman un equipo inseparable. De las dimensiones del filtro dependerá la potencia de la bomba que vayamos a instalar para conseguir una filtración eficaz.
El rendimiento de un filtro de piscina se mide en función de la claridad del agua que puede proporcionar, es decir, en función del tamaño de partículas que puede detener.
Existen cuatro grandes categorías de filtros, cada uno con sus ventajas e inconvenientes:
Es el más común, ya que su relación calidad/precio es la más conveniente. El elemento de filtro puede ser zeolita o granulado de vidrio para aumentar la finura de la filtración.
De forma alargada, el filtro de cartucho está hecho de papel o material sintético y está reservado para piscinas pequeñas. Fácil mantenimiento.
El filtro de diatomeas tiene la forma de una bombona. Muy buena filtración (3 micrones) pero que limita el mantenimiento y tiene el riesgo de obstrucciones.
La bolsa filtrante se usa a menudo en piscinas pequeñas y elevadas. Requiere mantenimiento frecuente y tiene baja finura de filtración.
El filtro de arena se compone de una tanque lleno en 2/3 de una materia filtrante, con forma de granos, de un diámetro adecuado para obtener una buena filtración.
El tamaño de las partículas retenidas depende del diámetro de los granos y de la velocidad a la que el agua atraviese el filtro de arena.
A pesar de su nombre, la arena, si bien es uno de de los filtros favoritos por no requerir casi mantenimiento, no es el único material empleado en este tipo de filtros.La zeolita o el vidrio también pueden utilizarse como elementos filtrantes.
La siguiente explicación aclarará tus dudas.
Es el filtro más habitual debido a su precio interesante, su facilidad de uso y su escaso mantenimiento. Suele ser arena de sílice yse aconseja disponer de dos granulometrías diferentes en el filtro para poder mejorar la filtración. En la parte baja conviene una capa de granulometría de entre 2 y 4 mm y en la parte superior, una capa de 0,4 mm. Pero también se puede optar por un tamaño de partícula intermedia de 0,6 mm que igualmente dará buenos resultados. Este tipo de filtros ofrece una finura de filtración de entorno a 35 micras. El uso de floculantes permite además aumentar su rendimiento.
Se trata de un mineral de origen volcánico. Su capacidad de filtración es muy superior al de arenapero a un precio también más alto. Esto se compensa con un bajo uso de productos de tratamiento del agua como floculantes. De hecho, su finura de filtración lo pone a la par de los filtros de diatomeas. Su uso y su mantenimiento son idénticos al de arena, y estos dos productos son totalmente compatibles. La arena puede sustituirse por la zeolita sin modificaciones en la instalación.
La arena de vidrio se trata de un material a base de vidrio reciclado pulido. Recientemente llegado al mercado, las bolitas de vidrio permiten aumentar el rendimiento de filtración en comparación con la arena y tienen la ventaja de que no crean una capa superficial como con la arena y la zeolita. De esta forma el lavado es más corto, favoreciendo así un ahorro de agua.
Es la más novedosa, una alternativa ecológica a la arena, gracias a su larga vida útil. Las bolas del filtro están hechas con fibras de polímero o Fibalon © . Al ser ligeras facilitan su transporte, se adaptan a todos los filtros y se pueden usar para limpiar su piscina más rápida y eficientemente, por lo que el filtro de tu piscina consumirá menos energía. Tienen un fácil mantenimiento y no se apelmazan.
Si aún sigues sin decidirte entre estos cuatro materiales, es mejor que optes por la arena que te proporcionará un agua perfecta en usos normales de una piscina privada por un coste y un mantenimiento asequible.
El filtro de diatomeas presenta forma de bombona con una membrana interior. Esta membrana es precisamente la que contiene la diatomita. La diatomita tiene forma de polvo blanco y proviene de algas microscópicas fosilizadas (la diatomea).
Durante la filtración, la diatomita se fija sobre la membrana y actúa como filtro. Este proceso permite alcanzar una finura de filtración de 3 micras proporcionando así un agua cristalina. Incluso elimina los aceites y cremas bronceadoras.
Sin embargo, el mantenimiento del filtro es más restrictivo que el de arena. La membrana filtrante debe ser desmontada y desincrustada cada año y las diatomeas también deben ser sustituidas. Además, con el fin de evitar la obstrucción de la membrana, es recomendable sobredimensionar el filtro.
En este caso, la filtración es realizada por un cartucho incluido en un recipiente. La dimensión del filtro depende del volumen de la piscina. El cartucho para filtro proporciona una filtración más fina que la del filtro de arena. Sin embargo, existen filtros con calidades distintas. Su finura de filtración está indicada en el embalaje. El filtro puede ser de papel o de material sintético.
Aunque normalmente se reserva para piscinas pequeñas, el filtro de cartucho requiere una limpieza manual frecuente que implica un desmontaje más o menos costoso. Los cartuchos tiene una duración limitada y conviene sustituirlos regularmente. Una de las ventajas del filtro de cartucho es que no necesita un lavado como el filtro de arena. Esto puede ser decisivo si no es posible instalar una evacuación de agua en casa. Una manera de disminuir la frecuencia con la que limpiamos el filtro es aumentar su capacidad, para poder ofrecer una superficie de intercambio superior, y que el cartucho así tarde más en ensuciarse.
Pequeño consejo: conviene contar con dos cartuchos; de esta manera, cuando necesites realizar una limpieza, podrás cambiar los filtros sin necesidad de limpiar el filtro sucio en el momento.
Las bolsas filtrantes suelen utilizarse más bien en piscinas elevadas de uso periódico e intermitente. Este filtro está compuesto por una bolsa que debemos limpiar regularmente.
Dependiendo del uso, cambiaremos la bolsa con más o menos frecuencia. La limpieza habitual del filtro resulta un tanto engorrosa.
Con respecto a la finura de filtración, debemos decir que va al final del pelotón en relación a los métodos nombrados anteriormente. Las bolsas filtrantes se utilizan normalmente en cajitas de filtración monobloque.
Y por si no fuera poco con escoger el filtro de la piscina, todavía queda medir el tamaño de la piscina. Sea cual sea, la capacidad de tu filtro de piscina se medirá en función del caudal que éste tolere.Para conseguir un agua de buena calidad, es conveniente filtrar la cantidad de agua total de tu piscina en un máximo de 6 horas (4 horas sería lo ideal).
Calcula el volumen de tu piscina, divídelo entre 4 y suma un coeficiente de seguridad de 1,3. De esta manera obtendrás el caudal mínimo de tu filtro.
**Ejemplo: Para una piscina enterrada de 40 m, es decir, 10 m3/h en 4 horas, debo escoger un filtro que tolere un caudal de 13 m3/h.
Para los filtros de arena, hay que tener en cuenta un parámetro adicional: la velocidad de filtración, que no debe exceder 50 m/h. Esto condiciona la superficie filtrante (S) mínima de tu filtro con S = C/50. Esta superficie te dará el diámetro mínimo de tu filtro.
En nuestro caso, con un caudal C de 13 m3/h, la superficie deberá ser de 0,26 m2, es decir, hará falta un diámetro de 575 mm.
Para aquellos que huyen de las matemáticas, tranquilos. La mayoría de los fabricantes indican casi siempre la superficie filtrante.
Tómate el tiempo necesario para elegir adecuadamente la bomba que deberá asegurar al menos el mismo caudal que el filtro.
Ficha escrita por:
Patricio, Ingeniero electrónico
Como profesional del mantenimiento e ingeniero eléctrico de formación, mis herramientas y utensilios están siempre a punto, incluso los fines de semana. El coche, la casa con todos sus electrodomésticos, el jardín y la piscina están ahí para recordarme que también necesitan mi atención. Y como mi presupuesto tiene un límite, pongo en juego mis habilidades, que intento ampliar día a día y proyecto a proyecto. Tengo un grupo de amigos con los que comparto el interés por el bricolaje los fines de semana: intercambiamos experiencias, consejos e ideas, nos ayudamos mutuamente a realizar nuestros proyectos en un ambiente alegre y amistoso. Este es también el encanto del bricolaje y si puedo ayudarte a ti también, será un verdadero placer para mí.