Ficha escrita por:
Tess, Asesora de decoración y pintura
47 fichas consejo
Siempre es agradable pasar un rato en la terraza. Pero cuando empieza a refrescar, es necesario utilizar una fuente de calor para poder alargar estos momentos de relax.
Las estufas de exterior desprenden un calor dulce y agradable y se fabrican en distintos modelos y sistemas de alimentación. Estos son los modelos más habituales:
Como su nombre indica, este tipo de estufa se asemeja a un parasol o farola, que sobre un pie de metal, finaliza con un sombrero calefactor. Es ideal para calentar grandes superficies y por ello es la opción más habitual para calentar una terraza.
Para elegir correctamente una estufa de pie para exterior, es necesario tener en cuenta estos criterios.
Este tipo de calefactor para exterior se fabrica habitualmente con dos opciones de alimentación: a gas o eléctrica. Pero no son las únicas, ya que recientemente se ha iniciado la comercialización de nuevos modelos que funcionan con pellets y con bioetanol.
La estufa de pie eléctrica necesitará conectarse a la red a través de un enchufe situado en el exterior o utilizando un alargador. Su funcionamiento es a través de un radiador de infrarrojos. Este sistema de calefacción radiante aporta un calor vivo y más intenso conforme te acercas a él.
La estufa de parasol a gas, es bastante más pesada debido al peso de la bombona de gas, que durante su combustión puede emitir un ligero olor. Siempre ha sido la mejor opción para calentar terrazas que no disponen de enchufes o donde la instalación de una toma de luz puede ser complicada.
Actualmente, las estufas de exterior de pellets o de bioetanol resuelven el mismo problema, ofreciendo la posibilidad de calentar cualquier tipo de terraza o patio con estos combustibles.
Si tienes dudas sobre qué tipo de estufa de exterior eléctrica es mejor, y dudas entre las de gas y las eléctricas, esta comparativa puede ayudarte a elegir:
Ventajas | Inconvenientes | |
Estufa eléctrica | Precio más económico que la de gas Ligera Inodora Menor potencial de riesgo Utilizable en interior Poco voluminosa | Mayor consumo Depende de la energía eléctrica Necesita una toma de corriente cercana o un alargador Presencia de cable eléctrico (riesgo de caídas) Capacidad de calor inferior a las estufas de gas |
Estufa de gas | Autónoma Consume menos energía que la eléctrica Potencia y rendimiento superiores Pesada (buen agarre al suelo) Tecnología fiable | Utilización recomendada para exterior Pesada (más difícil de mover) Más voluminosa que la estufa eléctrica Necesita un determinado tipo de bombona Presenta riesgo de incendio (combustión) |
Las estufas de exterior se fabrican en acero y en acero inoxidable. El acero inoxidable es más duradero en el tiempo, y es la mejor opción si se vive cerca de la costa, ya que el aire marino favorece la aparición y el desarrollo de la corrosión en los metales. Con el paso de los meses y en caso de haber sufrido golpes o roces, el acero epoxi puede presentar picaduras de óxido.
El tamaño del sombrero de la estufa define la superficie que la estufa puede llegar a calentar. Cuanto más grande sea el sombrero, mayor será el espacio calefactado por este tipo de estufa de exterior.
El regulador de potencia permite ajustar la intensidad de la radiación emitida por la estufa para adaptarla a cada necesidad.
Utilizados como calentador auxiliar, los braseros ofrecen un ángulo de calentamiento importante. Sin embargo, hay que estar cerca de él para sentir su calor. Son muy apreciados como objeto decorativo, además de por la belleza que ofrece el espectáculo de las llamas. Entre los modelos más populares, se puede elegir entre:
Los braseros se fabrican habitualmente en hierro fundido o en acero, ofreciendo confort y decorando a la vez tu terraza.
Este tipo de brasero gusta tanto por su estética como por su eficiencia. Fabricado en formas y colores variados, se alimenta con madera o carbón y ofrece un calor natural y muy agradable. Dispone de una base elevada sobre la que se sostiene el brasero o pequeña chimenea.
El brasero de chimenea posee un largo alcance del calor y la ventaja de que la salida de humos está en altura, por lo que el olor a combustión no molesta. Se fabrica en distintos materiales como el hierro forjado y la terracota.
El brasero de toda la vida tiene poca altura, por lo que suele colocarse debajo de una mesa, manteniendo los pies calientes mientras se disfruta de la terraza. Este tipo de estufa funciona gracias a la corriente eléctrica y dispone de unas rendijas de protección especialmente diseñadas para evitar el riesgo de quemaduras.
Gracias a su sistema de infrarrojos, es necesario conectarla a un enchufe exterior o a un alargo eléctrico. El principal inconveniente del brasero clásico o de las mesas calefactoras es que la difusión del calor está limitada a la parte baja de la mesa.
Actualmente se comercializan distintos modelos que responden a distintos gustos y necesidades.
Gracias a su diseño, los calefactores de exterior portátiles permiten su movilidad para calentar distintos espacios. Incluyen rejillas de protección para evitar cualquier tipo de contacto con la fuente de calor que pudiera ocasionar quemaduras.
Estos calefactores de pequeño tamaño, pueden colocarse sobre una mesa, en el suelo, e incluso colgarlos del techo. Se puede elegir entre dos tipos de alimentación:
Al disponer de un asa para facilitar el transporte y de pies para una colocación estable, este sistema de calefacción resulta el más práctico y sencillo de utilizar.
Si no se dispone de espacio para colocar una estufa exterior de pie, los calefactores murales de exterior pueden colocarse a distintas alturas de la pared. Al emitir calor por infrarrojos, deben conectarse a la red eléctrica.
Aunque los modelos con los tubos a la vista son menos estéticos pero igualmente eficaces, siempre puedes optar por diseños contemporáneos, en los que los tubos rojos quedan ocultos detrás de una placa metálica. Algunos modelos incluyen mando a distancia, soporte para convertirlos en calefactores de pie.
Ideales cuando no se dispone de espacio en el suelo, los calefactores colgantes tienen la misma forma que una lámpara de techo. Al colgarse de este, son una solución efectiva y segura si hay niños en casa, ya que queda fuera de su alcance.
Gracias al halógeno o a los infrarrojos, calientan el espacio que queda debajo emitiendo un calor intenso. Los calefactores colgantes de halógenos o de infrarrojos se fabrican en distintas formas y acabados para adaptarse a todo tipo de terrazas.
Ficha escrita por:
Tess, Asesora de decoración y pintura, 47 fichas consejo
Soy Tess, de 27 años, y llevo 7 en el mundo del bricolaje, en concreto en el de la pintura y decoración. ¡He encontrado cómo unir lo util y lo agradable a través de mi pasión por la escritura! Lanzarme a la redacción y poder aconsejar sobre decoración a los principiantes (o incluso a personas más experimentadas) es un verdadero placer para mi. Me encanta compartir mi saber hacer y mi experiencia y darte los mejores consejos para tus momentos de bricolaje.