Ficha escrita por:
Jerónimo, Electricista
Los bidés se consideran obsoletos hoy día, y mucha gente los hace desaparecer de sus baños. Si bien quitar un bidé te hace ganar espacio, no debes hacerlo de cualquier manera.
Se debe condenar tanto la entrada de agua como el desagüe. Todo ello debe hacerse eficazmente para evitar cualquier riesgo de fugas.
Desmontar el bidé.
Sellar del circuito de agua.
Condenar el desagüe.
Acabar el suelo.
Para clausurar un bidé debes ser capaz de instalar y usar racores de fontanería, tales como los racores y tapones. También debes intervenir sobre la tubería de PVC del desagüe para clausurarlo de manera estanca, frente al agua y a los olores. En cuanto al acabado, debes saber hacer una masilla, cortar y pegar baldosas si es necesario, pintar y hacer las juntas.
Unas 2 horas.
1 persona.
Cartucho de silicona;
una pistola de silicona;
pegamento de PVC;
yeso o masilla para tapar agujeros;
un taladro destornillador o un juego de destornilladores;
un juego de llaves planas o una llave ajustable;
papel de lija;
rollo de teflón;
tapones;
masilla hidrófuga (o de resina);
un pequeño cincel y un mazo;
una puerta de inspección sanitaria (opcional);
según el tipo de acabado: baldosas, juntas, cola de azulejos, pintura, etc.
Antes que nada, corta la entrada de agua de la vivienda cerrando la llave de paso. Purga el circuito de agua abriendo el o los grifos del bidé que debes desmontar, así como una segunda toma de agua próxima. Déjalos abiertos hasta que el agua no corra más (fría y caliente).
Comienza desmontando el grifo monomando o los grifos monobloc del bidé. Usa, para ello, una llave plana (o en su defecto una llave ajustable o inglesa) y desenrosca los racores que conectan los latiguillos.
Cuando hayas cerrado la llave del agua, desmonta la válvula y el sifón. Muy a menudo, la tubería de desagüe no está encolada, solo metida en un manguito. Basta con desenroscar los anillos de plástico y retirarlo para que se libere de la tubería de la pared.
Es posible que encuentres una junta de silicona entre el desagüe del bidé y la tubería del la pared. En ese caso, tira del tubo girándolo en el sentido inverso de las agujas de un reloj. Como consecuencia, la silicona se desprenderá.
Si el bidé está suspendido, desenrosca luego las tuercas que lo mantienen sobre los montantes y pon el bidé sobre el suelo (sobre un cartón o una lona de plástico). Usa la técnica de la tuerca y de la contratuerca para retirar los tornillos de la pared.
Si tu bidé es de pie, desatornilla los tornillos que lo mantienen sobre el suelo y retíralo de su lugar. En este caso, es también mejor colocarlo sobre un cartón o una lona de protección. Para asegurar una buena terminación, retira los tacos del suelo (o en su defecto, córtalos a ras del suelo) y sella los agujeros con una pasta de juntas (si el piso es de baldosas), una masilla hidrófuga o una resina.
A esta altura, debes tener frente a ti dos racores de suministro de agua, así como la tubería de evacuación.
Comienza por clausurar las entradas de agua. Para cerrarlas definitivamente, un fontanero profesional apretaría los tubos calentados con un soplete. Para hacerlo es necesario dominar la técnica, tener experiencia, y el resultado es irreversible. Sin embargo, hay tapones de cobre para soldar al final del tubo. Y el resultado es mucho más limpio.
Será preferible un cierre simple y reutilizable por si en un futuro fuera necesario.
Comienza limpiando las dos entradas de agua alrededor de las tuberías, de unos centímetros de diámetro y unos centímetros de profundidad.
Si es posible, poner tapones de rosca sobre los racores existentes, sin olvidar aplicar teflón sobre las roscas antes de colocar los tapones. Si la colocación de los tapones no es directamente posible, debes entonces hacer conexiones con racores locos que llevan una boquilla para introducir y fijar en las tuberías. Los tapones se enroscan en ese caso sobre las roscas (no olvides poner juntas de teflón o estopa antes de roscarlos).
Para estar lo más a ras de la pared posible, puedes torcer y deformar levemente las tuberías (tubos de cobre o PEX). El alicatado o la colocación de una placa de cartón-yeso te resultará más fácil y todo estará perfecto como si nunca hubiera habido nada en ese lugar.
La condena de la evacuación se hace con elementos de PVC.
Despeja el perímetro del desagüe unos pocos centímetros.
Para que la tubería sea hermética al agua y a los olores, debes colocar un tapón de PVC.
Si piensas reutilizar el desagüe en un futuro, coloca el tapón de PVC, y fíjalo con silicona.
Si el sellado es definitivo, aplica una cola de PVC.
El racor de desagüe de un bidé es en general de PVC de 40 mm de diámetro. Usa un tapón compatible con ese diámetro.
Aquí también, despeja el tubo lo suficiente para que el tapón no sobresalga de la pared (corta el PVC si es necesario).
Según el tipo de acabado que prefieras, hay varias posibilidades.
Tapar con masilla de rellenado y alisar para colocar directamente baldosas;
haz un corte limpio para poder instalar una trampilla de inspección;
rellena parcialmente y coloca una placa de cartón yeso (al que le aplicarás yeso y luego pintura).
En cualquier caso, antes de tapar nada, asegúrate de que la condena es hermética (reabriendo el suministro de agua).
Para la evacuación, no debe haber olores procedentes de la red. Para una prueba rápida, abre una toma de agua cercano (grifo del lavabo o grifo de la ducha), verás rápidamente si viene aire proveniente de la red, ya que aparecerán olores si el sello no es hermético.
Ficha escrita por:
Jerónimo, Electricista
Me formé como electricista y trabajé en este sector muchos años. Después me dediqué al mundo de la construcción, en elque tuve la oportunidad de coordinar, controlar y organizar varios proyectos de obra. Actualmente llevo 4 años restaurando una casa de campo con mi mujer y mi hija. Llevamos muchas horas invertidas en esa casa, y gracias a mi experiencia profesional y ahora también personal, me encantaría dar una mano a todo aquel que tenga dudas sobre el bricolaje y aconsejarle en algunos asuntos.