Ficha escrita por:
Denis, Autodidacta
La finalidad de un soplador es generar una corriente de aire suficientemente potente para desplazar los restos de plantas, en este caso las hojas, para agruparlas en montones. Sin embargo, el soplador puede tener otros usos, como la limpieza de canalones o el secado del mobiliario de jardín.
Un soplador sopla, en efecto, pero también puede aspirar y triturar las hojas y otros restos vegetales para mejorar la comodidad del usuario. Dependiendo de su tecnología, estas herramientas de jardín puede ser sopladores, aspiradores sopladores o aspiradores sopladores trituradores.
Soplador, cuya función se limita a soplar las hojas para acumularlas en un solo lugar. Muy ligero, constituye la oferta de primeros precios.
Aspirador soplador; para evitar la fastidiosa tarea de recoger las hojas, se ha añadido una función de aspiración. Los restos son aspirados y enviados a una bolsa que se puede vaciar.
Aspirador soplador triturador. Dado que las hojas son voluminosas, la idea es reducirlas por medio de un triturador situado antes de la bolsa, lo que limita de manera significativa su volumen, hasta 16 veces en los modelos más eficientes. Así la tarea puede alargarse y, además, tienes los restos listos para utilizarlos si lo deseas como compost.
Los diferentes modelos de sopladores utilizan energía eléctrica (enchufe o batería) o bien energía térmica a través de motores de gasolina de 2 o 4 tiempos.
Tu elección tendrá que ver principalmente con la superficie, la configuración del terreno y el tipo de trabajo que vas a efectuar.
Hay que indicar que la energía eléctrica se adapta a la inmensa mayoría de los usos domésticos. Cabe señalar que el modelo alámbrico solo permite la limpieza en una superficie restringida, dependiendo de la longitud del cable. Las versiones de baterías, por otro lado, están limitadas en términos de autonomía.
Para superficies de más de 1000 m² son preferibles los modelos térmicos o de gasolina. De hecho, todos están indicados para un uso prolongado.
Los motores eléctricos son más ligeros, más silenciosos y menos contaminantes pero existen diversos modelos. Veamos.
Los sopladores eléctricos exigen un mantenimiento menor, pero su principal inconveniente es el cable eléctrico, que genera idas y venidas incesantes por los terrenos arbolados, lo que hace poco cómoda su utilización. Su potencia se expresa en vatios (W).
Los sopladores eléctricos sin cable, suele funcionar con baterías de litio y son ideales para superficies pequeñas y/o muy pequeñas. Son a un tiempo ligeros, manejables, silenciosos y autónomos para poderlos desplazar fácilmente. Es una lástima que su autonomía en el tiempo apenas supere la hora y que la eficacia de su chorro de aire sea limitada..
La intensidad (expresada en amperios/hora Ah) y la tensión (expresada en voltios V) de las baterías, permiten evaluar su autonomía (cuanto más elevados son estos valores, más potente es el soplador y disfrutas de una autonomía más prolongada).
A diferencia de los sopladores eléctricos, los sopladores térmicos son más pesados, más ruidosos y más contaminantes.
Su mantenimiento también es más complejo debido al uso de aceite y de gasolina. Su puesta en marcha tras períodos prolongados de inactividad en ocasiones resulta difícil. Sin embargo, sus ventajas son innegables: son más potentes y sobre todo completamente autónomos. Con ellos dispondrás de una total libertad de movimientos.
Entre los motores térmicos, los de 4 tiempos son un poco menos ruidosos, y asimismo contaminan y vibran en menor medida que las motorizaciones de 2 tiempos.
La potencia de los motores eléctricos va de 750 W a 3.000 W, aunque la mayoría de los aspiradores sopladores eléctricos presentados tiene una potencia comprendida entre 2.500 y 3.000 W.
De igual forma, la cilindrada de los sopladores térmicos va de 25 cc a 50 cc o incluso a 70 cc en determinados sopladores profesionales.
Esta potencia permite generar flujos de aire de 150 a 500 km/h con caudales de 8 a 15 m3/minuto.
Los sopladores equipados con triturador pueden reducir los restos hasta 16 veces. Debes dar prioridad a los trituradores con turbina de metal antes que a las de plástico, ya que estos aparatos no solamente aspiran hojas.
Todo depende del peso, del tipo de trabajo y, por suerte o por desgracia, de la edad del usuario.
Los sopladores eléctricos pesan entre 3 y 6 kg, los sopladores térmicos son más pesados, con entre 4 y 18 kg.
Los sopladores más ligeros se sostienen con una empuñadura en su extremo, y por medio de una correa.
Los sopladores más pesados se transportan en la espalda gracias a un arnés más o menos acolchado, lo que aporta una comodidad de uso innegable.
Encontramos sopladores equipados con ruedas fijadas en el extremo del tubo. Los aspiradores sopladores más potentes pueden ir montados sobre ruedas autotractoras.
En tu elección pueden intervenir otros criterios, dependiendo de las características específicas.
El regulador de velocidad permite modular la potencia de soplado o de aspiración en función de los restos y de las superficies tratadas, lo que permite, por ejemplo, evitar la aspiración de guijarros o de frutos como bellotas o castañas hacia el triturador, o lanzar gravilla sobre el césped. El regulador, en los casos más sencillos, se limita a dos velocidades.
El volumen de los sacos va de 30 a 50 litros. Si eliges una bolsa demasiado grande, te arriesgas a sufrir debido a su peso. Si la escoges demasiado pequeña, te pasarás el rato vaciandola.
En el caso de los sopladores autotractores, la capacidad de las bolsas puede alcanzar los 250 litros o más.
La reducción de esfuerzo se consigue con el la cuerda de arranque, bomba de cebado, arranque electrónico o estárter automático. Estos dispositivos están diseñados para facilitar el arranque de tu soplador térmico.
Porque en este caso la vibración no aporta ningún placer, conviene equipar los sopladores con un sistema antivibración.
Un kit para canalones consiste simplemente en un tubo largo con forma de codo, adaptado para la limpieza de los canalones.
La elección de las boquillas de un soplador permiten concentrar el flujo de aire: cuanto más estrechas son, más potente resulta el flujo.
Sencillamente se trata de minimizar el desorden.
Para un terreno de menos de 1.500 m² con pocos árboles, un aspirador soplador eléctrico de 3.000 W te dará un resultado totalmente satisfactorio.
Si puedes incluirla, la opción triturador es muy interesante y aporta una indudable comodidad de uso.
Presta atención al peso, sobre todo si tienes que despejar una gran superficie y debes equiparte con aspirador soplador térmico. Y recuerda proteger tus oídos y llevar gafas de protección.
Ficha escrita por:
Denis, Autodidacta
Empecé con el mundo del bricolaje hace unos 10 años, cuando decidí comprarme una casa y tuve que reformarla. Después de cambiar el techo, rehacer los baños, la cocina, las habitaciones...construí un edificio anexo con un calentador de agua que funciona con luz solar. Después de todo, creo que me he convertido en un buen experto en bricolaje. Estuve tanto tiempo buscando información tanto en internet como en revistas de bricolaje, que ahora me parece justo compartir todo lo aprendido con aquellos que están en mi misma situación hace unos años.