Ficha escrita por:
Lola - marketera enganchada al bricolaje
La decoración industrial es un poco como cocinar: cada uno lo hace a su gusto. Si te apetece la aventura, aquí tienes algunas ideas fáciles de realizar. Descubre cómo dar a tus cuartos un espíritu de taller o de loft. Descubre hoy el arte de improvisar para obtener un baño o una sala de estar de estilo industrial.
La ventaja del estilo industrial es que puedes hacer muchas cosas que quedan bien, y con muy poco. Basta con recuperar madera (del viejo mueble a la caja de verduras), metales (hierro y acero) o ladrillos. Mezclando todo esto, puedes obtener fácilmente una decoración típica de estilo industrial. Y la otra ventaja (la que más nos gusta) es que todo el mundo puede hacerlo sin complejos, desde el principiante hasta el manitas más hábil.
¿Has vuelto a pintar un mueble de baño con efecto envejecido, pero dejando una mancha horrible? Bien hecho, le has dado un aspecto rudo y muy industrial. ¿Una mesa de salón con un rincón mal tallado? Enhorabuena, le acabas de dar un aspecto "recién salido del taller". ¿Has renovado una luminaria de metal que habías encontrado en el mercadillo? Saca el pecho, tienes el talento de los diseñadores expertos en decoración industrial. ¿Y el armario de la abuela, que has sacado del sótano para amueblar tu nueva habitación de invitados? ¡Genial! El reciclaje de muebles es de coste cero y está en el espíritu industrial.
Cuando se trata de decoración industrial, se trata de encontrar el equilibrio adecuado entre un efecto loft y un ambiente demasiado frío. La idea es acercarse al estilo taller pero evitando que parezca que tengas obras en casa. Por ejemplo, definiendo una correcta dosificación de los colores.
Puedes optar por una sola pared con papel pintado de efecto piedra y elegir una pintura ligeramente contrastada para las demás. Si te has decantado por las maderas claras y los colores crudos, un gran mueble de color aportará alegría y destacará sobre el resto. Puede ser un armario rojo, un sofá verde, unas estanterías amarillas. Si no tienes muchos muebles, es el momento de vestir tus paredes con estanterías metálicas para exponer objetos antiguos e insólitos. Sin olvidar la multiplicación de marcos, que calienta y personaliza la decoración de cualquier habitación de la casa. Otro truco es añadir luminarias o simplemente cambiar las bombillas. Las que emiten una luz amarilla crean un ambiente más agradable que las blancas.
Con unos pocos objetos bien pensados, la decoración industrial puede adquirir realmente otra dimensión:
Una lámpara de diseño sobre una mesa de comedor básica;
un gran reloj de pared con mecanismo aparente;
una hermosa alfombra que se extiende en gran medida bajo una mesa de café;
una gran cantidad de cojines en un sofá de cuero.
Test de personalidad: ¿eres del tipo “nada se tira” o “adicto a las compras”? En ambos casos, cambiar la decoración actual de tu salón por un estilo industrial será divertido. ¿Qué tal si aprovechas la oportunidad para sacar tus cosas viejas del ático? Puede que encuentres LA joya que dará a tu salón un aire de taller. La idea: recrear el espíritu de las fábricas jugando con las materias primas (madera, acero) y los colores neutros (negro, blanco, gris).
Por lo tanto, puedes crearte una mesa de café a partir de una paleta o un baúl. Otra opción es conformarse con estantes de pared en lugar de un aparador o instalar un guardarropa de metal en lugar de un perchero. Para que parezca un loft neoyorquino, deja una guitarra por ahí o coloca una vieja máquina de coser.
En cuanto a tus paredes, el efecto de ladrillo rojo o piedras naturales antiguas va muy bien, especialmente si tu suelo está revestido de parqué. Queda por decidir si tu sofá queda bien con el estilo industrial. El cuero marrón y negro, el algodón gris o los textiles de terciopelo ocre son los reyes (aunque un sillón de color quede bien junto a ellos).
Para un estilo industrial, naturalmente recurrirás más a la madera y la piedra. Sí, porque estos materiales se adaptan bien a las habitaciones húmedas. También en este caso, tu afición por el reciclaje puede ser muy útil. Se puede utilizar una tabla de madera gruesa para instalar un lavabo doble, haciéndole dos agujeros (¡qué ingenioso!). Con el uso de simples baldosas de yeso, puedes hacer fácilmente un mueble de lavabo. Y para terminar, lo puedes cubrir con una pintura de efecto piedra o mármol.
Si tienes una ducha, esta es una oportunidad para incorporar un efecto metálico a la decoración de tu baño. ¿Cómo? Optando por una puerta de ducha de perfil negro, en plan vidriera. Y si eres más de los que se relajan en una bañera, ¿qué te parece cubrir su exterior con un adhesivo? Hay rollos adhesivos con efectos metálicos (¡muy práctico!).
Para una cocina de estilo industrial, puedes apostar por el trío madera clara, metal negro y detalles de aluminio. En otras palabras: saca los clavos y las estanterías para exponer tus utensilios de cocina. Ollas y sartenes de acero inoxidable, tablas de cortar de madera, escurridores de metal, ¡todo puede ser decorativo! También es una buena excusa para cambiar tu alacena por un conjunto de estanterías de madera.
El home staging y el bricolaje también son soluciones interesantes. Tu mesa y bancos de jardín tipo cervecería son los muebles perfectos para un comedor industrial. Tu mesa de cocina puede transformarse rápidamente en una barra si le colocas unas patas metálicas altas. ¿Por qué no optar por el hierro forjado? Y renovar tu aparador te permite llevar el estilo al límite. Es muy sencillo pegando un rodillo de aluminio, efecto metal oxidado o un revestimiento de ladrillo. Resultado: ¡un bistró parisino!
La decoración industrial es posible, es fácil y está al alcance de todos los principiantes. ¿Te han inspirado estas ideas? Pues... ¡mano a la obra!
Ficha escrita por:
Lola - marketera enganchada al bricolaje
Hace 30 años caí, como por casualidad, en el sector de la distribución de bricolaje y jardinería y descubrí un mundo apasionante. Durante todo este tiempo he podido aprender y practicarlo (no todo lo que quisiera). Y siempre he tratado de compartir y ayudar a otros a que se enganchen al DIY, tanto como yo lo estoy.