Ficha escrita por:
Mariluz, autora del blog Bricoydeco
Una tabla de cortar es una herramienta indispensable en cualquier cocina, ya que es la mejor opción para manipular y cortar los alimentos. A la hora de elegir entre una de plástico o de madera, debemos tener en cuenta lo siguiente:
Las tablas de plástico son fáciles de limpiar, pero también se estropean con los cortes del cuchillo. Las bacterias pueden llegar a introducirse en estas ranuras dificultando su eliminación;
las tablas hechas con maderas duras como la de arce o bambú, resisten mejor los daños del cuchillo que las de plástico. Para desinfectarlas puedes limpiarlas con una cucharada de lejía diluida en agua.
Por otra parte, las tablas de madera son elegantes y nunca pasan de moda.
Para hacer tu propia tabla de cortar de madera se necesitan las siguientes herramientas y materiales:
Si se cuenta con las herramientas indicadas, el coste aproximado de los materiales es de unos 30€. Podrás adquirir algunas de las herramientas y materiales empleados a través de esta simulación de cesta de compra de ManoMano.
La principal ventaja de esta tabla de cortar de madera es que se ha hecho a medida para colocar sobre uno de los senos del fregadero. De esta forma, se pueden lavar los alimentos y cortarlos sobre la tabla sin ocupar espacio en la encimera de cocina.
Además su altura permite situar un plato llano debajo, de manera que los alimentos una vez cortados se pueden deslizar hacia el plato.
Por otra parte, este proyecto de bricolaje tiene un nivel de dificultad bajo, por lo que resulta idóneo para manitas principiantes. Para llevarlo a cabo se empleará una mañana o tarde, aunque el proceso de curación total del acabado al aceite puede durar varios días.
Para hacerlo tú, tan solo se deben seguir los pasos que se detallan a continuación.
En primer lugar se cortará el tablero de madera con una sierra de mesa, una sierra circular o una de calar. La medida de las piezas dependerá del tamaño del seno de tu fregadero, por lo que en este caso en concreto han sido de:
53 x 40 x 1,8 cm para la parte superior;
40 x 5 x 1,8 cm para los laterales.
A continuación, se encolarán los laterales a la pieza superior con cola blanca de pintor y se colocarán sargentos en ángulo para ejercer presión y facilitar la unión.
El siguiente paso consistirá en decorar la tabla de corte aplicando diferentes tonos a la madera. Para ello, se delimitarán las zonas con cinta de carrocero o de pintor y se aplicará lasur o tinte para madera con una brocha.
En este caso se ha combinado un tono castaño y uno color nogal. De esta forma, además de resaltar las vetas naturales de la madera, se ha conseguido proporcionarle un acabado decorativo y muy elegante a la tabla.
El último paso consistirá en aplicar un acabado con aceite de tung. El acabado al aceite resulta idóneo para la madera a la que se le va a dar un uso alimentario, ya que es uno de los más naturales que existen. Le proporciona un tacto sedoso y realza la veta. Además, el aceite rellena los poros de la madera y se endurece al entrar en contacto con el oxígeno, formando una película protectora, pero permitiendo que la madera pueda respirar y no sufra con los cambios de temperatura y humedad.
En este caso se aplicará aceite de tung. Este aceite proviene de las nueces y semillas del árbol de tung, que se encuentra principalmente en China. Su principal ventaja es que mejora la resistencia al agua y al moho de la madera, así como al desgaste. Para aplicarlo se han de seguir los siguientes pasos:
Lijar la superficie con lana de acero de grano fino para suavizar la madera y facilitar la penetración del aceite.
Aplicar aceite sobre una gasa de pintor y extenderlo sobre toda la superficie. Se recomienda aplicar una capa fina.
Esperar unos 30 minutos y retirar el exceso de aceite con un papel absorbente.
Después de un par de horas, repetir el proceso hasta dar un mínimo de tres capas. Cada una de ellas elevará el tono de la madera y aumentará su resistencia.
Finalmente, habrá que esperar que el aceite se cure completamente y cristalice antes de emplear la tabla de cortar. Este proceso puede durar varios días (entre 3 y 7), dependiendo del tipo de madera y de la humedad interna y externa.
Podremos saber si se ha completado el proceso de curación mojando la tabla con agua y comprobando que las gotas no calan la madera.
Después de todos estos pasos tendremos la tabla de cortar terminada y podremos colocarla sobre uno de los senos del fregadero.
Además de ser muy práctica, ya que nos ahorrará espacio sobre la encimera, su diseño le aportará un toque de elegancia a nuestra cocina.
Para un buen mantenimiento de la tabla de corte, límpiala tras su uso y renueva la capa de aceite una vez al año. De esta forma, te asegurarás que siempre esté como el primer día.
¿Qué te ha parecido este proyecto para hacer una tabla de cortar de madera? Si te ha gustado, no te pierdas este otro sobre cómo hacer una mesa para cocina con palets.
Ficha escrita por:
Mariluz, autora del blog Bricoydeco
Me declaro DIYermanica, una gran amante del reciclaje, del tuneo y la customización de muebles y objetos a los que con mucho cariño les doy una segunda oportunidad para convertirlos en piezas únicas.